La rabia, un peligro latente
A pesar de que España es uno de los pocos países que ha conseguido erradicar la rabia, esta enfermedad sigue siendo endémica en casi todo el mundo.
Se trata de una patología vírica aguda producida por un Rhabdovirus que afecta al sistema nervioso central, que es mortal casi sin excepción y que se transmite al hombre normalmente por la saliva a través de mordeduras o arañazos de animales domésticos o salvajes que están infectados.
Los primeros signos pueden tardar hasta SEIS semanas en aparecer en GATOS y hasta OCHO en PERROS.
Muchos animales pueden ser reservorios, como los murciélagos, los zorros y nuestros animales domésticos: el perro y el gato.
Desde hace años en Asturias (como en Galicia, País Vasco y Cataluña) ya no es obligatoria la vacunación en perros y gatos (salvo a las razas potencialmente peligrosas), mientras en el resto del país se mantiene la vacunación obligatoria de todos los perros.
Teniendo en cuenta que compartimos frontera con países que registran casos de rabia cada año, que se comercializan y transportan animales de muchos lugares y que cada vez viajamos más con nuestras mascotas, nuestra recomendación es inmunizarlas frente a esta enfermedad.